miércoles, 19 de marzo de 2008

MALA MEMORIA


Nuestro némesis periodístico Aldo mariátegui publica hace poco en Correo saludos más que afectuosos a la revista Gente, aquel medio "paladín de la decencia periodística en el Perú", aquí le recordamos el sucio papel que cumplió su director, factótum y dueño: el cuasi-puerco Enrique Escardó en la época de la cleptocrática dictadura de Fujimori. Es curioso que aldito, tan propenso a criticar duramente a quienes colaboraron con la dictadura velasquista haga omisa memoria de casos aun más flagrantes y temporalmente más cerca...y reviente bombos a un pasquín de publi reportajes e instrascendente como es GENTE. Hace poco por una auroral filiación velasquista dio de alma al recientemente fallecido Adolph, como si no todo escritor o intelectual progresista haya sido tentado por el discurso inagural de la revolución velasquista...hasta el propio Altahus confiesa haber participado de SINAMOS, sin que melle este hecho su integridad moral a diferencia del puerco denominado Rafael Escardó, delincuente prontuariado y condenado por el Poder juducial Peruano justamente por teñir de negro la mermelada que tanto le gusta comer a Aldo Mariátegui y brindar por supuesto por los 50 años mal habidos de Gente.


CASO ESCARDO

De otro lado, la Cuarta Sala Penal también continuó con los interrogatorios en el proceso conocido como “Caso Escardó” que se sigue a Montesinos, Enrique Escardó y Abraham Chuquillanqui, por favorecer económicamente a la revista Gente a fin de que publique un reportaje –elaborado en el SIN- que sirvió para despojar de la nacionalidad a Ivcher.

Sin embargo, sí reconoció que Víctor Riveros (ex periodista de Gente ya fallecido) fue agente del SIN y que durante su gestión en el gabinete de asesores, le tocó pagar los gastos de sepelio del citado hombre de prensa.

La próxima audiencia del “Caso Escardó” se realizará el lunes 21 de agosto a las 11.00 de la mañana, en tanto que dos horas antes se iniciará el “Caso Ivcher”, siempre en la sala de audiencias de la Base Naval del Callao.

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